Hace 130 años un grupo de conocidos caminaron juntos para dar comienzo a un banco que se distinguiría por su calidad de empleados.
Ese banco, que hoy se conoce como Popular, siempre ha trabajado no solo por dar un espacio donde los clientes puedan confiar sus finanzas, sino donde los empleados que los atienden, de igual forma, pudiesen sentir ese calor humano y apreciación por su trabajo.
El pasar de los años trajo una estructura mucho más sólida y grande, que se fue abriendo paso en distintos pueblos de la isla y en distintos mercados fuera de Puerto Rico. Ese caminar por el espacio del tiempo permitió ver cómo aún en tiempos difíciles Popular estaba ahí para sus clientes, comunidades y su gente, los empleados.
Desde principios del siglo pasado ya se comenzaron a ver grandes aportaciones de Popular hacia sus empleados y, de igual forma, de estos hacia la empresa. Una de las anécdotas de ese principio de siglo provino del empleado Pedro Quiñones (Periquín), quien tras el paso del huracán San Felipe en 1928 perdió su hogar, y no fue hasta que Don Rafael Carrión Pacheco intervino que pudo lograr rehacer su hogar.
Con el pasar del tiempo, Popular fue creando un capital humano mucho más diverso. Al inicio de los 1930, había muy pocas mujeres trabajando en la banca, pero don Rafael conoció a esta mujer brillante llamada Amina L. Ferré, quien comenzó en el banco como oficial para luego convertirse en la primera mujer en ocupar el puesto de gerente en Popular.
Y así el tiempo fue pasando y se fueron cimentando proyectos y beneficios que ayudarían al empleado a sentirse bien atendido en el banco. Uno de los primeros beneficios lo fue el bono de Navidad que se entregó en 1935. Luego de eso, continuaron con otros como:
Estos fueron algunos de los pasos dados durante el siglo pasado, junto a muchos programas adicionales que hicieron de Popular un lugar ideal para trabajar.
Según indica Mariemi Sierra, gerente de la división de Nuestra Gente, “uno de los cimientos de Popular es su gente y una de las cosas que deseamos hacer es seguir reafirmando eso, por medio de escuchar sus necesidades y conocer qué es lo que más valoran y cuáles son sus experiencias en la organización. Balancear las expectativas de nuestros compañeros es bien importante para nosotros”, puntualizó.
La empresa busca, por medio de distintos esfuerzos, lograr que los empleados permanezcan en la compañía porque su experiencia es la adecuada y porque se sienten a gusto donde están. “Quien trabaja es porque disfruta lo que hace, y lo que hace tiene un impacto en la vida de muchas personas. Lo que se busca es esa combinación perfecta en la que disfrutas de una experiencia de trabajo, mientras aprendes y contribuyes” continuó Sierra.
Por otro lado, Eduardo Negrón, vicepresidente ejecutivo y principal oficial administrativo del grupo de Administración de Popular, Inc. mencionó, “Popular siempre ha tenido presente a la gente. Con eso en mente, hemos buscado desarrollar proyectos que ayuden a fortalecer la colaboración, y el continuo aprendizaje de nuestra gente. Por eso, en el 2022 comenzamos el desarrollo de Popular Campus, un proyecto importante y estratégico que albergará, entre otras cosas, el Centro de Desarrollo que es donde educamos a los empleados”.
Según explica Eduardo, este desarrollo contará con wellness center, cancha, piscina, equipo de entrenamiento y yoga, todo esto para trabajar la parte física y emocional. Actualmente y desde hace varios años, Popular cuenta con una Clínica de Salud, y por medio de comunicaciones internas, exhorta a los empleados a que se hagan exámenes preventivos. El enfoque es el bienestar integral.
Otros aspectos en los que Popular ha buscado ser competitivo es en el ámbito salarial, haciendo estudios y cerrando la brecha entre hombres y mujeres en las mismas posiciones. Además, los beneficios como maternidad y paternidad han sido extendidos para dar más tiempo a los padres de crear vínculos con sus recién nacidos. Por otro lado, y luego de la pandemia, la empresa integró el trabajo híbrido para aquellas posiciones que pueden ofrecerlo.
Ambos ejecutivos indican que la empresa busca dar un nuevo propósito, que se tenga un objetivo claro y que se conozca que “ponemos a la gente en el centro del progreso”, lo que también incluye a los empleados.
“Queremos que todo el mundo entienda que lo más importante es la gente y que el desarrollo del capital humano de una empresa es esencial para el crecimiento sostenible y su éxito a largo plazo. Al invertir en desarrollo y crecimiento de los empleados, una empresa está invirtiendo en sí misma y en su capacidad para competir en un mercado en constante cambio”, concluyó Negrón.
Como parte de las celebraciones de nuestro aniversario 130, les presentamos las Historias de Progreso, que son retratos de clientes comerciales que muestran cómo Popular pone a la gente en el centro del progreso.